Opinión

Otro elefante

Adriana Bermúdez

Adriana Bermúdez

Creyente en que con la verdad, todo se puede. Comunicadora social, Magíster en Administración.

Olmedo López, el exdirector de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo para la atención de Desastres, UNGRD, está buscando proteger su integridad. Quizás, después de las denuncias de Sneyder Pinilla y al ver que lleva un mes buscando un principio de oportunidad con la Fiscalía que no se ha concretado, decidió hablar con los medios de comunicación para proteger su vida y la de su familia. Por ellos, seguramente, vale cambiar la estrategia.

Comenzó hablando con Vicky Dávila, la directora de Semana y, en la noche del domingo, lo hizo con José Manuel Acevedo de Noticias RCN. Es claro que buscar medios de derecha era la mejor manera para garantizar que su caso saliera a la luz.

López reconoce que, como programa político, le fallaron al país, pero que el presidente Petro no sabía de la corrupción que se daba en la UNGRD. Sin embargo, es interesante verlo reconocer lo que todos sabemos: nuestra política es corrupta desde su esencia, porque los políticos llegan endeudados a sus cargos, debido a lo onerosas que son sus campañas y eso hace que tengan que “vender su alma al diablo” para poder pagar lo que fue invertido en ellas por quienes los apoyaron. Como su ingreso no es suficiente para retornar lo invertido, consiguen contratos o puestos para el círculo cercano de aquellos que los apoyaron. Quid pro quo dirían algunos. Lo más triste, es que todos sabemos que así funciona la política y nadie hará nada para cambiarla, porque lo importante es llegar, ganar la elección.

Interesante también, escucharlo hablar de un “cónclave” de ministros, encargados de tomar las decisiones más relevantes y hasta de congresistas de oposición que, realmente, hacen parte de las entrañas del presidente… Si esa declaración es cierta, esto último sí sería un golpe muy duro para quienes se jactan de estar en partidos que tienen grandes diferencias con el actual Gobierno… pero sus compañeros no.

Dentro de sus declaraciones, Olmedo López habla de una suma aproximada a los 380.000 millones, desviados a través de la UNGRD, dineros que debían servir para ayudar a comunidades vulnerables. Además, dice estar dispuesto a retornar el dinero con el que se quedó, aunque aún no queda claro cuánto es ni a qué corresponde… Esperemos que nos dé verdaderos detalles en el principio de oportunidad que está negociando y cuya demora le impide presentar pruebas a los medios.

López dice estar arrepentido, pide protección y seguridad principalmente para su familia, porque él ya es un testigo protegido. Este caso es la oportunidad para que la fiscal Luz Adriana Camargo, evidencie su independencia del Gobierno y aclare lo que ocurre al interior del mismo. Y puede que en otros gobiernos no haya ocurrido, que los fiscales sean de bolsillo del presidente, pero esta es la oportunidad para marcar la diferencia, lo que daría credibilidad a las acciones que tome esta dependencia de aquí en adelante.

En las entrevistas, Olmedo López hace referencia a recibir órdenes y transmitirlas, aunque, todavía, no hay claridad en quién dio dichas órdenes. Recordemos que Sneyder Pinilla le pidió a Olmedo que hablara, Olmedo le pide “al cónclave” que hable, pero aún no sabemos quiénes hacen parte del cónclave, cuántos son y qué papel juegan en este nuevo entramado de corrupción del Gobierno. Sneyder dijo, días atrás en su entrevista con Semana que, después de dos reuniones de Olmedo López con el ministro Velasco, empezó a recibir órdenes de su jefe para comenzar la compra de congresistas para pasar las reformas.

Pero, como era de esperarse, las declaraciones a Semana ya arrojaron resultados ante los medios. Luis Fernando Velasco, ministro del Interior y salpicado en estas declaraciones, fue entrevistado en Caracol Radio y desmintió a López, acusándolo de haber robado en el contrato de ‘Caregato’ en La Mojana, el cual, según dice Velasco, se contrató por 130000 millones, cuando empresas reputadas dijeron que podría hacerse “por 40 o 45000 millones”. También habla de los contratos de Uribia, que, según Velasco, los hizo Olmedo López con una funcionaria de esa Alcaldía y con el padre de ella; al igual que los contratos que firmó en todo el país, concentrados en empresas de Itagüí. Esos, entre otros casos que Velasco considera, deberán ser investigados por la Fiscalía.

A su vez, el ministro del Interior considera que López “quiere quedarse con toda la plata que se robó de la UNGRD”, por eso pide inmunidad a través del principio de oportunidad ante la Fiscalía. Velasco advierte que, cuando corresponda, procederá a atacarlo, porque no se defenderá de las acusaciones. Con esto, parece querer minar la voluntad delatora de Olmedo López, dándole a entender que no se dejará culpar. Velasco manifestó que el presidente Petro le pidió que contratara a López en la Unidad de Gestión del Riesgo, pero que él, por “olfato” no quiso. ¿Por qué con ese olfato, no detectó lo que pasaba en la UNGRD, sobre todo si ya sabía de contratos dudosos? ¿Acaso, por no ser jefe directo, no es responsable de mantener los ideales del Gobierno en el que trabaja?

Velasco, durante su entrevista, repite que fue el presidente Petro quien confió en López y lo ubicó en el Gobierno… Y que fue la confianza del presidente la que traicionó, porque Petro jamás daría una orden como las que Olmedo dice que recibió. Frente a Name, dice que durante siete meses engavetó la reforma pensional que ahora los tiene a las carreras, dando a entender que el presidente del Senado, tampoco está implicado, lo que reforzaría lo denunciado por Olmedo López, quien dice que hay en la oposición, quienes no lo son tanto.

Sin embargo, en este Gobierno, causan curiosidad casos como el de Sandra Ortiz, exconsejera presidencial para las Regiones, quien fue culpada por Sneyder Pinilla por llevar el dinero a Iván Name, presidente del Senado e, inmediatamente fue puesta en evidencia, la separaron de su cargo sin miramientos. ¿Será acaso, que no sabe tanto como los otros?

Wadith Manzur, presidente de la Comisión de Acusaciones, también fue salpicado por López, por ser otro de los beneficiados con el negocio de los carrotanques de la Guajira a través de contratos.

Olmedo López manifestó que asistió a las reuniones, a los desayunos, que atendió a los congresistas, a la mensajera (Sandra Ortiz) y aseguró que Sneyder dijo la verdad, que Iván Name, presidente del Senado y Andrés Calle, presidente de la Cámara, recibieron 3000 y 1000 millones, respectivamente, en septiembre de 2023. Como era de esperarse, tanto Name como Calle dicen que eso no es cierto, ¿Acaso creemos que los señores van a salir ante los medios de comunicación a decir “Sí, recibí el dinero, lléveme a la cárcel”? ¡Claro que no! Negarlo hasta el final ha dado resultados durante décadas.

Y aunque el exdirector de la UNGRD hace estas denuncias con el objetivo de una “no repetición”, lo que sería perfecto que ocurriera, es casi una utopía pretender que nuestra política cambie cuando, desde el propio Gobierno, nadie hace nada por ello porque, la verdad, nadie sabe cómo lograrlo.

Ahora, queda la duda, ¿No era Olmedo López de la esfera más cercana del presidente Petro? ¿Cómo hizo para “pasar de agache”, frente a su amigo y jefe, durante tanto tiempo, sin levantar sospechas?

Queda claro que el ahora presidente Petro, es excelente para denunciar la corrupción de otros gobiernos, de otros partidos y otros intereses, porque con la que se da al interior de sus toldas, no pudo. Otro presidente al que se le entra un elefante a Palacio y no lo ve.

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