Opinión

Al Tolima Nunca le Toca

Gentil Gómez Oliveros

Gentil Gómez Oliveros

Líder Social y Agricultor del Oriente del Tolima – Columnista Invitado

En distintas momentos de la historia nacional López Michelsen y Galán coincidieron en afirmar que uno de los vicios del Frente Nacional fue el rompimiento de las fronteras ideológicas de los Partidos; esto  llevo a los dirigentes de la democracia colombiana a centrarse en la repartija burocrática del poder dejando de lado la verdadera prioridad que es la representación de la voluntad popular, el ejercicio del poder al servicio de los ciudadanos y a partir de ahí la construcción colectiva de alternativas de desarrollo humano y estructural integral, así como la búsqueda del bien común.

Ese vicio se enquisto en el liberalismo colombiano el día en que decidió aceptar la paz a cambio de posiciones de poder, en ese simple acto poco a poco el liberalismo fue abandonado su verdadero sentido de existencia histórica; aproximándose a las dinámicas de sus adversarios políticos, con ello se perdió la coherencia ideológica, junto con la autoridad ética y moral para hacer control político. Se repartieron el poder, más no las soluciones de los problemas colombianos, por eso hoy el Partido Liberal está más pendiente de posiciones burocráticas que de ser el gestor de las verdaderas reformas que necesita el estado para satisfacer las necesidades ciudadanas.

El liberalismo actual no marca rumbos, solo se mueve al ritmo pendular de la convulsionada política colombiana; todo esto después la proclamación de la Constitución de 1991 donde por la vía democrática y sin guerras civiles pudo plasmar en ella su ideario; pero el partido que abolió la esclavitud, el de las luchas sociales, agrarias, laborales, ambientales, el promotor del reconocimiento de las minorías, el escudero por tradición de los que no tienen voz, sucumbió ante su grandeza y siguió los caminos equivocados generando con ello que muchos de sus hijos lo repudiaron y se alejaran poco a poco.

Históricamente las prácticas clientelistas y burocráticas son propias de ciertos sectores del conservatismo; hasta el punto que se declararon partido de gobierno del Presidente Petro, quien todo el tiempo en sus alocuciones les restriega buena parte de su responsabilidad histórica respecto a las desgracias de la patria. De no ser por qué el mismo mandatario rompió la coalición, allí estarían pendientes de la nómina estatal, pienso que aún lo hacen, pero discretamente; por ahora anuncian que serán oposición, pero votaron la primera reforma tributaria a pupitrazo limpio, dejando solo a Uribe de quien también pelecharon. Ni que decir del gobierno Santos donde muchos subieron sus niveles de glicemia clientelista con la mal llamada mermelada, por aquí en las montañas del oriente tolimense se pronuncia un dicho: “llora más que godo por fuera del presupuesto”.

Pierde legitimidad social y política el Partido Liberal cuando se aleja de lo fundamental del debate nacional, aproximándose a la indiferencia frente a la realidad que viven los colombianos, olvidando con ello la fuente real de su razón de existir que no es la nómina del estado y sus contratos, sino la construcción de la tan anhelada justicia social y una visión colectiva de desarrollo.

En la tierra firme del Tolima, la tierra de la estrella liberal Murillo Toro, del Revolucionario Melo, del gran Tulio Varón quien resistió las épocas oscuras junto con Uribe Uribe, la del Jurista Echandía, la misma tierra insigne donde Benjamín Herrera quiso cimentar el retorno del liberalismo al poder, en la Convención Liberal de 1922 dijo el General:” Ibagué será el Sinaí, donde se Dictaran las Nuevas Tablas de la Ley del Liberalismo Colombiano”, ello no solo fue una proclama política, sino una proclama ideológica en busca del poder, fue también la construcción de un faro del conocimiento y el libre pensamiento, en esa misma fecha se fundó la Universidad Libre para dar luz a las mentes libre pensadoras del país; si el partido quería en esa época,  y hoy quiere volver al poder debe estar preparado, renovado moral, ética e intelectualmente.

El Tolima enfrenta un alejamiento gradual del liberalismo de sus bases sociales y de sus prácticas ideológicas, se evidenció en las pasadas elecciones para alcaldes; al interior de la colectividad el simple hecho de pensar y expresar con sentido crítico analítico genera prevención hacia quien lo hace, hasta el punto que se le proscribe como hacían los partidarios de Caro en la república conservadora. No es que no se pueda hablar, porque si se puede, pero la agenda la determina una minoría con el objetivo de mantener la armonía interna; mientras tanto Barreto, quien tampoco es muy conservador que digamos sin mayor esfuerzo viene acogiendo el liberalismo que esta desorientado, inconforme y un que otro lentejo quienes no razonan que el néctar que ofrece, es el néctar de la flor carnívora de la amazonia; te deja beber pero a la vez te engulle en sus entrañas. Copartidarios, un partido que no permite el debate interno y la sana competencia, no genera un Empalme Generacional, es un partido que decrece y no avanza.

A diario se escucha en los medios noticiosos como los sectores políticos del Tolima se pelean hasta el nombramiento del portero de morgue de un hospital; pero de las soluciones de fondo a la problemática integral del Departamento por parte de los congresistas no se escucha nada. En los últimos días se ha venido criticando interna y públicamente a la Representante Olga B., por sus prácticas burocráticas y clientelistas, se rumoran divisiones e inconformidades, presuntamente ella solo gestiona puestos, contratos y toda suerte de favores para sus empresas, su familia y la de los diputados de la bancada liberal junto con unos pocos amigos; tal y como lo advertí lo que más temía el Jaramillismo les llegó, y es un nuevo sector de acción política dentro de la colectividad, este es el Olguismo, vino de la izquierda y está apertrechada con cartera de burgués, de esos que desprecia Petro; por fin hubo cambio después de tanta armonía interna, por fin alguien alteró el Status Quo.

Contrario a muchos yo no voy a tomar postura personal respecto a las acciones de la congresista, eso corresponde al fuero soberano del constituyente primario quien la eligió y debe evaluar los hechos que se le indilgan donde presuntamente su comportamiento no es el de una liberal que prioriza el bien común, sino que por el contrario prioriza el bien de su interés individual; no puede ser que solo se le evalúe a la congresista por sus gestiones y asignaciones burocráticas. ¿Alguien se ha puesto analizar el verdadero contexto de sus funciones? Yo por ejemplo desde esta atalaya, legitimado por la representación que me otorgaron miles de liberales tolimenses, le pregunto:

Señora Olga B., ¿Por qué el Tolima siendo un Departamento priorizado dentro de Acuerdo de Paz, aún hoy no consolida la inversión pública territorial en materia de vías terciarias y secundarias, desarrollo rural integral, potabilización de agua, tratamiento de residuos, inclusión social, educación tecnológica para el trabajo, presencia de la fuerza pública en antiguas zonas de conflicto, sustitución de cultivos ilícitos, ampliación de mecanismo de planeación PDET a otros municipios afectados por el conflicto por ejemplo en el Oriente del Tolima?.

Señora Olga B., ¿Por qué no ha liderado una iniciativa congresional para hacer realidad la promesa del Gobierno del Cambio respecto a la revisión del TLC con Estados Unidos que le permita al sector agropecuario aliviar sus cargas, sobre todo en materia de precio de insumos y semillas que beneficia a transnacionales como Monsanto quien tiene de hecho un monopolio de ese sector?, ojo se aproxima una crisis para el sector lechero, y los cafeteros no estamos viviendo sabroso como muchos creen.

Señora Olga B., ¿Qué paso con el Triángulo del Tolima, le van a poner orden, lo van a culminar, o lo van a dejar inconcluso y abandonadas sus instalaciones?

Señora Olga B., ¿Qué va pasar con los hospitales públicos de 1 y 2 nivel y las deudas de las EPS cuyos recursos están estancados en las arcas del estado, queremos un cambio en el sistema de salud, pero también se necesitan soluciones inmediatas, la protección de la vida humana no da espera.

Señora Olga B., ¿Ya hizo una evaluación del modelo de salud territorial donde solo alquilan carros y contratan suministros, pero no hay suficientes médicos para atender la demanda de tan importante plan?

Señora Olga B., ¿El hospital de Segundo Nivel que usted prometió para el Oriente del Tolima, será construido finalmente en Melgar o Carmen de Apicalá, o ya no habrá tal hospital? de paso no olvide que Villarrica no tiene hospital.

Señora Olga B., ¿Cómo hacer para otorgar más cupos universitarios para formar médicos, jefes de enfermería, nutricionistas, gerontólogos, y demás profesionales de la salud?  se requieren estos profesionales para implementar del modelo de salud que usted avalo en el congreso.

Señora Olga B., ¿Qué paso con la seguridad ciudadana?, aquí no hay paz total, por el contrario, se amenaza cada día más la poca paz que hemos logrado alcanzar en los últimos años.

Señora Olga B., Usted se queja en el Tolima por que el gobierno Petro no tuvo en cuenta el Departamento en materia de inversiones estratégicas, queremos ver un debate suyo sobre tal actitud inequitativa que nos mantiene en el atraso y la desigualdad.

Señora Olga B., El cambio climático está afectando la agricultura, así como el siniestro de agua y alimentos para miles de tolimenses, ¿Cómo podemos desde los territorios dinamizar los planes de contingencia nacional para atender estas amenazas? nos estamos quedando sin agua.

Señora Olga B., ¿Ya reviso los efectos sociales y económicos que traerá la nueva ley de financiamiento que se tramitará en el congreso? estaremos atentos a sus posturas al respecto.

Lamento mucho la división que causo la pugna desatada por una curul de congresista y su UTL, llamo al debate respetuoso y objetivo, llamo al respeto por el disenso y la construcción de consensos; los liberales no pueden seguir persiguiendo y proscribiendo liberales; yo no soy antijaramillista, considero que el Dr. Jaramillo no es el dueño del liberalismo, pero sin él, el Partido no estará completo, cualquier sector liberal así sea el mismo naciente Olguismo debe coexistir en armonía ideológica y respeto mutuo por las diferencias; estoy preparado para lo que venga respecto al debate de mis opiniones, total como decía mi padre: “De Tantos Golpes que la Vida me ha Dado, las Patadas de las Mulas me son Caricias”.

Hace unos días un liberal me dio un consejo que tome con prudencia y humildad, me dijo: ” corrija sus actitudes humanas y posturas radicales, o se va quedar solo”, hoy con mi acostumbrado respeto le digo a ese insigne liberal:” corrijamos el rumbo del liberalismo tolimense, pongámonos de acuerdo sobre lo fundamental, que el pueblo no está dejando solos”.

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