Dos años de guerra en Ucrania: la paz sigue esquiva mientras el conflicto se estanca en trincheras
Dos años después del inicio del conflicto en Ucrania, la situación de guerra continúa sin signos de resolución.
Ni Rusia ha logrado vencer al ejército ucraniano para poner fin al conflicto que comenzó en febrero de 2022, ni Kiev cuenta con los medios necesarios para expulsar al invasor de su territorio. Esto ha llevado a un estancamiento en el frente y a una guerra de trincheras de difícil solución.
En los primeros compases del conflicto, la superioridad aparente de Rusia llevó a una rápida toma de localidades ucranianas y a la aproximación a Kiev con la intención de derrocar al presidente Volodímir Zelenski. Sin embargo, errores logísticos y la resistencia ucraniana impidieron que las tropas rusas lograran entrar en la capital, convirtiendo la fecha en un símbolo de resistencia nacionalista.
A pesar de dos años de guerra, el apoyo a la resistencia contra Rusia sigue siendo fuerte en Ucrania, pero la disponibilidad de voluntarios ha disminuido y las bajas han llevado al Ejército a buscar reclutas de manera más agresiva, incluso embargando cuentas bancarias o retirando permisos de conducir a quienes se niegan a unirse.
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Determinar el número de víctimas en estos dos años es complicado debido a la propaganda y la desinformación de ambas partes. Según Rusia, el Ejército ucraniano ha sufrido 383,000 bajas, mientras que Ucrania afirma que las bajas del bando ruso ascienden a 372,000. La ONU informa que 10,000 civiles han muerto y más de 5.2 millones se han desplazado internamente, con seis millones de refugiados ucranianos en otros países.
A pesar de los ataques diarios, los avances en el frente han sido mínimos en el último año, y se estima que aproximadamente el 26% del territorio ucraniano sigue ocupado por Rusia.Los bombardeos rusos se han intensificado, pero Ucrania ha logrado responder con ataques en territorio ruso y contra la flota, limitando su movimiento en el Mar Negro.
Aunque Rusia ha anunciado avances recientes, el conflicto continúa en un punto muerto, con las fuerzas ucranianas defendiendo nuevas líneas mientras intentan resistir los avances rusos.
