Emergencias por temporada invernal: un panorama crítico en Colombia

Las lluvias no dan tregua en el país. La reciente avalancha en el corregimiento de El Encano, en Pasto, que dejó cuatro muertos y al menos 70 familias sin hogar, es solo un reflejo del impacto que la primera temporada invernal del 2025 está teniendo en diferentes regiones de Colombia. Este evento, además de ser una de las tragedias más graves del año, se suma a un preocupante aumento en el número de emergencias registradas por lluvias, deslizamientos e inundaciones.

Cifras alarmantes de la ola invernal

De acuerdo con la Dirección de Bomberos de Colombia, entre el 1.º de enero y el 10 de marzo, se han reportado 1.379 emergencias derivadas de las condiciones climáticas, lo que representa un incremento del 9,4 % en comparación con el mismo periodo del año anterior. El aumento más significativo se ha dado en las inundaciones, con un crecimiento del 60 %, al pasar de 143 casos en 2024 a 230 en 2025.

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Asimismo, los deslizamientos de tierra han subido considerablemente, pasando de 47 a 108 eventos, mientras que las avenidas torrenciales se han duplicado, registrando 8 incidentes este año, en contraste con los 4 ocurridos en 2024.

Las regiones más afectadas

Las intensas lluvias han golpeado con fuerza a varias zonas del país, dejando una estela de destrucción y numerosas familias damnificadas. Según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), hasta la fecha, 23 personas han perdido la vida, mientras que 17.608 familias enfrentan condiciones críticas debido a las emergencias.

Bogotá encabeza la lista de eventos reportados, con 331 incidentes, seguida por Antioquia (226) y Cundinamarca (130). En ciudades como Medellín y Cali, el impacto de la temporada invernal se ha reflejado en la caída de árboles, con 198 casos en la capital antioqueña y cerca de un centenar en la capital del Valle del Cauca.

Otros departamentos severamente afectados incluyen Huila (111 emergencias), Tolima (104) y Valle del Cauca (94). Además, Risaralda, Santander y Boyacá han reportado un número considerable de incidentes, con 56, 54 y 45 casos, respectivamente.

En contraste, los departamentos de Amazonas, Vichada, Guaviare, Vaupés y Guainía no han registrado incidentes relacionados con lluvias hasta el momento.

El Eje Cafetero, en alerta máxima

El Eje Cafetero es una de las regiones que ha enfrentado los mayores estragos por la ola invernal. En lo que va del año, 150 familias han sido afectadas por inundaciones y deslizamientos en Pereira, Dosquebradas y Marsella, los municipios con más reportes en Risaralda.

Según Carolina Ramírez Laverde, coordinadora de Gestión del Riesgo en ese departamento, las lluvias han generado vendavales, movimientos en masa e inundaciones en Balboa, Pereira, Mistrató, Santa Rosa de Cabal, Dosquebradas y Marsella.

En el Quindío, la Corporación Autónoma Regional (CRQ) mantiene bajo observación diez puntos críticos, mientras que en Caldas, varias vías departamentales permanecen bloqueadas por derrumbes, especialmente en la zona norte, centro y oriente del departamento.

Un llamado a la prevención

Ante el incremento de las emergencias, las autoridades han insistido en la necesidad de fortalecer las estrategias de prevención y mitigación del riesgo en las zonas más vulnerables. Se recomienda a la población estar atenta a los comunicados oficiales, reportar situaciones de riesgo a las líneas de emergencia y seguir las indicaciones de los organismos de socorro.

Con la temporada invernal aún en curso, Colombia enfrenta un panorama desafiante en materia de gestión del riesgo, en el que la preparación y la respuesta rápida serán clave para reducir el impacto de los fenómenos climáticos en la población.