Entre cielo y tierra…
Las intenciones de Fecode frente al paro estaban en duda. Era claro que la educación de los niños no era su prioridad, pero no teníamos claro cuál sí lo era. Sin embargo, estamos en la época de las redes sociales, de la inmediatez, donde todo lo que pasa es compartido en tiempo real y, gracias a ello, conocimos un video del señor Nelson Alarcón, miembro de la mesa de negociación del paro, en una reunión informal en la calle, donde cuenta que éste “es de largo aliento” y que su objetivo es “derrotar al Centro Democrático, para derrotar la ultraderecha y llegar al poder en el 2022”. Hasta manifiesta que descubrieron que hay que cambiar de táctica, haciendo las marchas de manera escalonada y que están expuestos a sanciones, a un descuento de 43 días de paro. Ojalá fuera cierto.
Creo que es por eso, porque se dieron cuenta de las consecuencias a las que están expuestos y porque, gracias a Dios se filtró el video, que resolvieron volver a clases a partir de este martes quince (15) de junio; sin embargo, su comunicado, entre otras, habla de “asistir a las diversas actividades académicas y pedagógicas inherentes al cargo, a partir del día martes 15 de junio del año en curso, y a continuar participando activamente en las tareas, las jornadas y acciones convocadas en el marco del paro nacional“, ante lo que me pregunto, ¿cómo van a hacer para cumplir con las actividades laborales y las propias del paro, si ambas se cumplen en el mismo horario? ¿Cómo harán para atender a dos señores a la vez?
Durante este paro, no solo quedó evidenciado que Fecode tiene un objetivo político y que, por ello, no deben ser más jurados de votación debido a que su sesgo pone en riesgo la democracia; dejaron al descubierto que su prioridad no es ofrecer educación que propenda por la construcción de un mejor país; demostraron que están en la espiral de todos los sindicatos en Colombia: obtener el mejor provecho para ellos, los sindicalizados, sin importarles qué destruyan en el camino, como hicieron los sindicatos de Telecom, I.S.S, Flota Mercante Grancolombiana, por nombrar algunos, que se encargaron de extraer para ellos lo que más pudieron de cada empresa, sin pensar en que estaban acabando con la gallina de los huevos de oro y dejando miles de personas sin empleo, sin oportunidades, todo porque primó el bien particular sobre el general.
Los miembros de Fecode son los responsables de educar a quienes van a producir los cambios de nuestro país, a quienes lo construyen. Pero ¿cómo lo harán si se mantienen en paro? ¿Cómo van a respondernos por esos 43 días que nuestros niños pasaron sin educación, solo en esta ocasión? Y, siempre me pregunto ¿quién es responsable de supervisar las labores que realizan? ¿A quién rinden cuentas frente a sus obligaciones laborales? Porque parece que ni el Ministerio de Educación tiene la capacidad y/o la autoridad para exigirles cumplir con la responsabilidad en el cargo que desempeñan y por el que se les paga. En definitiva, y es triste decirlo, parece que la educación de nuestros niños está en manos de NADIE.