Las Poesías de Tito
Teresa de Calcuta
Teresa: en medio de lodazales,
viviendo entre las ruinas, fuiste grande.
Teresa de Calcuta
en el torbellinos de los dioses y los sabios,
donde se están pudriendo las carnes,
se doblan los hombres
y se amontonan los cadáveres.
Teres por los caminos escabrosos
de los hombres lapidarios,
desafiantes, temerarios,
que creen en el más allá
y elevan oraciones
pero tienen el corazón de piedra
la mente obnubilada
y sus pies de barro.
Débil figura
agigantada por natura
navegando por mares inquietantes y profundos.
Las desdichas del género humano sobre sus hombros
y en su pecho los últimos suspiros de los hombres.
En la negritud de las noches
la madre naturaleza
convertida en infierno.
Y en ese maremágnum mordiente
la única que tiene fuerzas,
todas las fuerzas de la tierra,
todas las fuerzas de los cielos.
TERESA:
Uno de los infinitos enigmas de Dios.
Una fulgurante estrella,
en medio del dolor y la tragedia.
Contando los últimos suspiros
de unos cuerpos carcomidos
sin esperar de ellos siquiera una sonrisa.
El tiempo fue lentamente
moliendo su existencia.
Es la historia viva
en un concierto de desdichas.
Guerrera sin reposo
como Juana de Arco,
como la madre de los Gracos,
como todas las mujeres santas.
No se rindió su cuerpo,
ni de sus labios un solo lamento!
Solitaria cerrándole los ojos a la muerte,
buscando a Dios donde quiera que se encuentre.
Tito Augusto Bustos Roa (07-09-1997)