“Los de ruana”

Los acontecimientos de la última semana con el Gobierno Petro, nos dejan claro que serán los más cercanos a él, los más beneficiados con sus medidas. Esto ya no suena extraño, porque si algo ha caracterizado a este mandatario, es que beneficia a sus amigos, a los amigos de sus amigos y a los familiares de sus amigos, más que a cualquier otro colombiano. Y antes de que empecemos con “Es que Duque, Santos, Uribe, hicieron lo mismo”, recordemos que el presidente Petro se hizo elegir bajo la promesa de “el cambio”, lo que hasta ahora, no hemos visto.
Lo que sí hemos vuelto a ver “los de ruana”, es el tráfico de influencias, evidenciado en la autorización que dio Migración Colombia para la salida del hijo de la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, el pasado mes de enero, cuando, sin contar con la autorización notariada porque ella se encontraba fuera del país y gracias a una llamada, se permitió la salida del infante con su padre. Y, como dijo el funcionario de Migración “por ser un funcionario de alto perfil” ellos colaboran, porque si fuéramos usted o yo, le aseguro que no nos dejan llevar a un niño a ninguna parte.
“Los de ruana” que habitan en San Andrés, se quedaron esta semana esperando al presidente, quien dijo que estaría en la isla para recibir el fallo del Tribunal de La Haya. No tiene sentido pensar que no llegó porque tenía miedo de perder, pero lo cierto es que dejó esperando a la cúpula militar, a los isleños, a los aviones, helicópteros y barcos que se movilizaron para celebrar la soberanía de la isla. Confiemos en que el desplante no haya sido porque se quedó enredado tomándose algo fuertecito con los amigos.
“Los de ruana” hacen fila a las afueras del Banco Agrario para reclamar el subsidio otorgado por el Departamento de Prosperidad Social, según dicen, porque antes podían reclamarlo por diversos medios, ahora, solo pueden hacerlo en las oficinas de dicha entidad. Sin embargo, la directora del DPS dice que las extensas filas son culpa de la desinformación de quienes van por el subsidio de un millón de pesos.
Y hablando del subsidio que recibirán cien mil personas “para no estar en bandas”, ¿será que el presidente pretende que esas personas, los consentidos que hacen parte de bandas delincuenciales o que pertenecen a la Primera Línea, hagan filas durante horas para reclamar un subsidio? Porque es claro que, donde los pongan a esperar para reclamar aquello que consideran les pertenece, son capaces nuevamente, de incendiar el país de “los de ruana”.
Pero mientras los ciudadanos buscan un apoyo por parte del gobierno para muchas cosas, el mandatario de los colombianos hace un recorrido por Europa para conseguir dinero que le permita “mantener” al ELN mientras están sentados en la mesa de negociación, porque, de nuevo, los importantes son los amigos. ¿Cómo hará para ignorar a tanto colombiano desempleado que busca formas y medio para salir adelante y no lo logra?
Definitivamente, lo que esperaban los colombianos de su presidente no se está dando. Mientras él siga con la intención de otorgar los mejores beneficios a los delincuentes o a quienes actúan fuera de la ley y dejar desamparados a quienes han contado con una suerte adversa aunque cumplen estrictamente la ley, no solo no encontraremos la “paz total”, sino que veremos cómo continúa deteriorándose el espíritu de un pueblo que le apoyó en las urnas porque esperaba a un mandatario que fuera capaz de ofrecerle acciones reales que le permitieran salir adelante, lo que hasta hoy, no está ocurriendo para “los de ruana”.




