Once Caldas vence a Deportivo Pereira 3-1, pero un episodio de racismo empaña el Clásico del Eje Cafetero

Once Caldas se impuso como local ante Deportivo Pereira en una nueva edición del Clásico del Eje Cafetero, con un marcador de 3-1 en el estadio Palogrande de Manizales. La noche estuvo marcada por el histórico gol número 350 de Dayro Moreno, que igualó a Radamel Falcao García como el máximo goleador colombiano, pero también por un lamentable incidente de racismo.

El atacante hondureño Rubilio Castillo, quien anotó su primer gol en Colombia al abrir el marcador casi al minuto 18, se convirtió en víctima de un insulto racial. Tras una falta cometida por el defensor de Once Caldas, Jerson Malagón, Castillo fue llamado “simio” por Joel Jesús Contreras, según denunció el entrenador de Pereira, Luis Fernando Suárez. Castillo, visiblemente afectado, reclamó al árbitro, quien decidió continuar el juego sin tomar medidas.

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El ambiente se tensó aún más cuando Carlos Darwin Quintero, suplente del Pereira, tomó por el cuello a Contreras en un acto de solidaridad con su compañero. A pesar de la agitación, el árbitro expulsó a ambos jugadores, pero no actuó frente al incidente de racismo.

El Deportivo Pereira emitió un mensaje en redes sociales condenando el racismo, mientras que Once Caldas también expresó su rechazo absoluto a cualquier acto discriminatorio. Sin embargo, la situación continuó con la reacción de la hinchada manizaleña, que celebró la salida de Castillo en el minuto 69 con gritos y aplausos, lo que motivó el dolor de Suárez, quien expresó: “Me duele el país, de verdad”.

Por su parte, Contreras negó las acusaciones y aseguró que nunca llamó “simio” a Castillo. La polémica continúa sin una respuesta oficial de Dimayor, aunque Acolfutpro, el sindicato de futbolistas, condenó el incidente y reiteró la importancia de erradicar el racismo en el fútbol colombiano.