Dayro Moreno se corona como el máximo artillero en la historia del fútbol colombiano

La noche del sábado en el estadio Palogrande quedará grabada para siempre en la historia del fútbol colombiano. Dayro Moreno, delantero del Once Caldas, no solo comandó la contundente victoria 3-0 frente al América de Cali, sino que escribió su nombre con letras doradas al convertirse en el máximo goleador histórico del balompié nacional.
Con dos tantos marcados ante el conjunto escarlata por la jornada 12 de la Liga BetPlay 2025-I, el atacante tolimense alcanzó los 353 goles en su carrera profesional, superando al icónico Radamel Falcao García, quien acumulaba 351.
Gol tempranero y golpe de autoridad
Desde el pitazo inicial, Dayro demostró que no estaba para especulaciones. Apenas al minuto 5, aprovechó un pase filtrado y definió con maestría frente al portero Santiago Silva, abriendo la cuenta para el ‘blanco blanco’ y acercándose al récord.
Pero no se conformó. En el segundo tiempo, cuando el América intentaba reaccionar, Dayro volvió a aparecer. Fue en el minuto 76 cuando, con ese instinto goleador intacto, controló dentro del área y definió con precisión para marcar su gol número 353, desatando la euforia en las tribunas.
Una carrera de cifras legendarias
A sus 39 años, Dayro no solo se mantiene vigente, sino que atraviesa uno de sus momentos más simbólicos. Con pasos por equipos como Millonarios, Atlético Nacional, Junior, y experiencia internacional en México, Rumania y Argentina, ha construido una carrera sólida que hoy lo pone en la cima del escalafón de goleadores colombianos.
Así está el ranking actualizado:
- Dayro Moreno – 353 goles
- Radamel Falcao García – 351
- Víctor Hugo Aristizábal – 346
- Carlos Bacca – 342
Falcao, su más cercano perseguidor
Mientras Dayro celebra su nueva marca, la atención también se dirige a Radamel Falcao, quien actualmente se recupera de una lesión. La carrera por el trono del gol aún no termina, pero el delantero tolimense ha puesto la vara alta con una combinación de longevidad, constancia y olfato goleador.