Historias

Historias de hombres solo para mujeres: historias de mis ex – el clavo

Annie Navia

Annie Navia

Arquitecta de profesión, viajera por vocación y soñadora a tiempo completo. Creo en el viajar como parte del aprendizaje sobre otras culturas. Escribo solo para recordar y compartir aquellas experiencias que enriquecen mis viajes y alimentan mi vida.

En sueños, viniste a visitarme la semana pasada. Con una amplia y bonita sonrisa, me dijiste que habías estado leyendo las historias de mis EX (aunque no sé cómo, si solo publicó en Facebook), de todos modos, a mí me alegró mucho saber que lo hicieras.

Entonces te pregunté ¿si estabas esperando que escribiera la tuya? Pues, aunque fue corto el tiempo que compartimos, hay una experiencia para contar. Pero tú parecías no escucharme y no parabas de sonreír, entonces me percaté de que creías que ya lo había hecho.

Supongo que te habrás identificado más con EL SI, PERO NO, que con EL SI TE VI, NO ME ACUERD. Pero… y espero no decepcionarte, la verdad es que – en mi caso – fuiste EL CLAVO.

Hay un dicho que dice: “Un clavo, saca otro clavo”, y de ahí el nombre de este personaje, y aunque me advirtió que no quería serlo, terminó convirtiéndose en él, pues llegó justo después de una de mis rupturas no superada.

EL CLAVO es un prototipo que yo creería que todas las mujeres hemos tenido.

O acaso, ¿Cuál no ha intentado encontrar refugio en unos brazos desconocidos, cuando termina una relación?

¿Cuál no ha buscado llenar ese hueco que deja alguien que se va cuando no te lo esperas?

O ¿Cuál no ha intentado tratar de encontrar una luz que te saque de la oscuridad en la que quedaste?

Diría yo que todas… y todos.

Esta relación suele iniciar de una manera rápida, pues en tu estado no hay tiempo que perder, y sin saberlo, andas casi a la espera de que alguien venga a rescatarte del abismo que te separa del dolor y el equilibrio. Es más, cuando este hombre aparece, todo prejuicio que hayas cultivado a lo largo de tu vida desaparece y aunque no lo idealizas como un príncipe azul, sí que te genera algo de esa paz que has perdido. Entonces cierras los ojos y te lanzas a experimentar algo que muy raras veces tiene un final feliz.

Este es un personaje que la verdad, tiene bastante gracia: es amable, simpático, y tal vez hasta lindo, y aunque tú corazón ya está ocupado, esperas que él pueda desplazar a ese que tal vez se ha convertido en EL INNOMBRABLE.

Entonces, inicias una relación que descaradamente pretendes iniciar donde terminó la otra, es como si sintieras que es una segunda parte, solo que ahora con otro protagonista. Ante estas expectativas, no te das la oportunidad de conocerlo realmente como es, pues tú único interés egoico es el de estabilizar tus emociones, y todo lo demás pasa a un 2do plano.

El man se esfuerza – para que lo vamos a negar -, pero la verdad es que no le alcanza, algo no logra conectar contigo y no sabes si es él, el momento o tú. Sin embargo, ya te ha devuelto algo de la confianza que habías perdido, te sientes fuerte, decidida y con ganas de enfrentar la vida, y entonces reconoces que aunque ha sido de gran ayuda, sientes algo de culpa por no poder responder como quisieras.

Como es de esperarse la relación no evoluciona y termina rompiéndose por 2 razones, una porque ya no lo necesitas, o dos, porque aparece otro que ya no es EL CLAVO, sino que es EL QUE TE HACE CLICK.

POSDATA PARA LOS HOMBRES: Puede que el nombre y el rol utilizado en este texto no sea el más halagador aparentemente, pero si leen con atención se darán cuenta que pueden haber sido parte fundamental en el crecimiento de una mujer para la cual ustedes hayan sido EL CLAVO.

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba