TE FUISTE
Te fuiste
y me dejaste a la deriva
sin un adiós, sin una despedida.
Sólo escucho tus silencios
con una voz que viene de muy
lejos
sin causarte dolor mis
sufrimientos.
Ya no te acuerdas
que compartíamos nuestras
quejas,
que nos besábamos tras las
rejas,
que nos decíamos cosas bellas
y que nos jurábamos amor
eterno.
Hoy, todo es letra muerta.
Ese cúmulo de palabras
han quedadas olvidadas,
en el tiempo viajero
que todo lo olvida, lo oculta
lo descuartiza o lo sepulta.
El dolor causado
hace parte de un pasado,
que deja marcas
y huellas imborrables.
Creo que es la causa principal
de nuestra tragedia.
Ahora mi vida
duerme en el desierto
azotada por los huracanes,
muerta de frío
y herida en el alma.
Te silenciaste para siempre
y de verdad lo siento.
Cerrando los caminos
del regreso
sembraste tu destino
y por desgracia el mío.
Me da alegría haber llegado
al puerto donde atracamos
en el mes de marzo,
pero me lastima
que la fuente que acarició
nuestras ardientes carnes se hubiese secado.
Preferible no habernos
encontrado,
hubiésemos ahorrado
torrentes de lágrimas
y emborronado menos páginas
de esta historia para mi sagrada.
Ahora camino sobre el fuego
sin importar me queme
buscando la verdad de tu
silencio.
Durmiendo sobre témpanos de
hielo
ha sangrado mi piel,
sin besar la tierra
he estado muy cerca de ella.
Buscando lo que no voy a
encontrar
he escuchado el llanto de los
mares,
las quejas de las montañas,
los llantos de las barras del hierro y del acero
que se retuercen
cuando un hombre y una mujer
que se han jurado amor eterno
se despiden para siempre.
Tito Augusto Bustos Roa (22-12-2024).