Opinión

Hacer la diferencia

Adriana Bermúdez

Adriana Bermúdez

Creyente en que con la verdad, todo se puede. Comunicadora social, Magíster en Administración.

La jueza primera penal municipal de Santa Marta con funciones de control de garantías, Olmis Cotes, es mi heroína esta semana. Revivió mi fe en la justicia y en quienes desde allí, hacen su trabajo con verdadero amor y compromiso.

La jueza, al ver que Enrique Vives Caballero no se presentaba a la audiencia y que su diagnóstico no ha sido presentado, decidió ir a buscarlo a la clínica psiquiátrica donde se encuentra internado para continuar con el trámite. Esto, porque se cansó de encontrar tantas irregularidades en el proceso que se sigue contra el hombre que el pasado 13 de septiembre, atropelló y asesinó a seis personas en Santa Marta.

El actuar de esta jueza me hizo pensar ¿Cuántos casos podrían haberse juzgado, si alguien hubiera hecho algo como esto, en vez de esperar el vencimiento de términos? ¿Por qué la jueza Cotes sí pudo ir hasta la clínica y confirmar el estado de salud del implicado, mientras otros jueces simplemente cierran los expedientes y avanzan al siguiente caso?

Es claro que con el cargo no viene el interés por realizar bien el trabajo, pero el actuar de la jueza hace evidente que necesitamos un verdadero ente veedor, auditor o regulador, que se encargue de garantizar que aquellos responsables de impartir justicia lo hagan con eficiencia, porque lo está pasando con la cantidad de casos que se pierden en el tiempo es que la impunidad se está encargando de cultivar a los delincuentes, quienes, junto a sus abogados, ya descubrieron cómo hacerle ‘conejo’ a la justicia y obstruirla.

Desde aquí, ¡Gracias jueza Olmis Cotes! Por hacer su trabajo como la ciudad de Santa Marta lo necesita, como la justicia en Colombia lo requiere, como lo esperamos y necesitamos de usted. Aunque es triste decirlo, gracias por hacer la diferencia haciendo lo debido.

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Un comentario

  1. Gracias por su reconocimiento en nombre de mi bella tierra :Santa Marta, como bien y acertadamente usted lo expresa el proceder de la Jueza O.C nos devolvió en efecto la confianza en la justicia. Abrazo fraterno desde el caribe al querido y musical Tolima.

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