Se termina el año 2020
Llegamos al 20 de diciembre del 2020. Un año muy duro, descrito por la revista Time como “the worst year ever”, el peor año de la historia. Nadie imaginaba en Colombia a principios de este año bisiesto y emblemático que fuera a ser un año tan complicado y difícil. Todo cambió en marzo, con el inicio de la pandemia y, como lo han descrito varios analistas, comenzó un nuevo siglo, un ciclo de la historia que marcará las siguientes décadas.
En mi condición de historiador aficionado, traté de registrar muchas cosas de este periodo de pandemia, analizando las circunstancias actuales haciendo paralelos con la historia. Documenté la pandemia más cercana, la de la gripe española de 1918, revisando lo que pasó en Colombia y en el Tolima, con énfasis en Bogotá y en Ibagué. Escribí varias crónicas al respecto en mis dos blogs.
A mediados del año, recibí una invitación muy especial de Juan David Rincón, de Tolima Online, para escribir mis crónicas en este importante portal. En las primeras semanas traté de hacer el doble ejercicio de escribir una crónica a mediados de la semana sobre economía y la actualidad de la pandemia, junto con una crónica de fin de semana sobre historia del Tolima en el siglo XX, buscando analogías y enseñanzas frente a la crisis del 2020. Me desbordó este doble trabajo y terminé escribiendo exclusivamente las crónicas de fin de semana, que eran más interesantes para los lectores.
Con Juan David conversamos muchas veces, buscando encontrar el mejor enfoque a mis aportes al portal. Siempre respetuoso y cordial, construimos una buena relación, que espero perdure por varios años más. Así, en este año escribí sobre la gripa española en Ibagué en 1918, la llegada del primer vuelo a nuestra ciudad en 1919, el correo aéreo en los años 20s, la llegada de mi abuelo Pedro Antonio Niño a la ciudad, los IX Juegos de 1970 y muchas crónicas más. Escribí sobre Marilyn Monroe viajando en Avianca, en un extraño paralelo con un barrigazo de un avión similar donde viajaba el Deportes Tolima. Recordé la hazaña de Pedro Jota Sánchez en 1968, así como la amable ciudad que era Ibagué en aquellos felices años 60s. También escribí sobre el Deportes Tolima, mi equipo de toda la vida. Espero haber podido contribuir en los duros meses de confinamiento del 2020.
Llega la temporada navideña y es hora de hacer una pausa. Durante los últimos meses la vida nos cambió en la familia, por la circunstancia del Covid19 que contrajo mi madre, quien batalló contra la enfermedad con la misma valentía y coraje que ha tenido toda la vida y que conté en una pequeña crónica sobre su campeonato nacional en el deporte del bolo en los IX Juegos. En esta navidad, tenemos la alegría de tenerla otra vez sana, después de casi 3 meses de batalla contra un enemigo muy poderoso, que ya ha causado la muerte a más de 40.000 colombianos. Esa enfermedad me llevó a suspender algunas semanas mis crónicas, yo también estuve enfermo en el último trimestre del año.
Esta columna dejará de aparecer hasta mediados de enero, espero que Juan David y su equipo me extiendan la invitación para acompañarlos en el 2021, con nuevo material y nuevas energías. Al igual que todos los colombianos, tengo muchas esperanzas en el nuevo año. Con ojos de economista y de historiador, esperamos que este nuevo periodo sea positivo para el país y para el mundo. A mis lectores y a todo el equipo de Tolima Online, les deseo unas festividades tranquilas y un muy próspero año nuevo.