Sean ‘Diddy’ Combs es sentenciado a cuatro años y dos meses de prisión por cargos de prostitución

Este viernes 3 de octubre, el rapero y productor Sean “Diddy” Combs fue sentenciado a cuatro años y dos meses de prisión (50 meses) tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte para ejercer la prostitución. El fallo fue emitido por el juez federal Arun Subramanian en Nueva York, quien también impuso al artista una multa de 500.000 dólares.
El caso se remonta a septiembre del año pasado, cuando un gran jurado federal acusó a Combs tras una extensa investigación por tráfico sexual. En total, el productor enfrentaba cinco cargos: uno por conspiración con fines de extorsión, dos por tráfico sexual y dos por transporte para ejercer la prostitución.
El juicio comenzó en mayo y, tras dos meses de deliberaciones, en julio el jurado lo declaró no culpable de conspiración y tráfico sexual, lo que le evitó una posible sentencia de cadena perpetua. Sin embargo, sí fue hallado culpable de los dos cargos de transporte para ejercer la prostitución, delitos que podían acarrearle hasta 20 años de prisión.
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Durante la lectura del fallo, el juez Subramanian destacó la gravedad de los hechos: “Abusó de estas mujeres. Usó ese abuso para salirse con la suya, con sus ‘freak-offs’ y noches de hotel. La evidencia del abuso es contundente. Estos delitos dañaron irreparablemente a dos mujeres. Usted las drogó. Usted tenía el poder y los recursos para continuar”. El magistrado señaló que no estaba convencido de que algo así no pudiera volver a ocurrir.
La defensa había solicitado un máximo de 14 meses de prisión, mientras que la fiscalía pidió 11 años y tres meses. Los funcionarios de libertad condicional recomendaron entre seis y siete años. “Una sentencia de más de 11 años no es razonable, pero 14 meses no serían suficientes”, afirmó el juez al justificar su decisión.
Previo a la sentencia, Combs envió una carta al tribunal en la que pidió otra oportunidad y se disculpó públicamente, incluso por agredir a su expareja Cassie Ventura en 2016. “Mi antiguo yo murió en la cárcel y una nueva versión de mí renació. La cárcel te cambia o te mata; elijo vivir”, escribió. El artista aseguró que esta experiencia cambió su vida para siempre y prometió no volver a delinquir.




