Cuentos de miedo
Estoy seguro que, a la fecha, no existe una sola persona en el mundo que no conozca lo que es un cuento infantil o un cuento de hadas. Por supuesto, imagino que no todos han tenido la oportunidad de disfrutar de los mismos, la desigualdad existe y a muchas personas, desde niños, los enfilan a la guerra como ya sabemos que ocurre y no solo en Colombia.
Ahora bien, si mal no recuerdo hace algunos años hablé sobre este tema en una de mis columnas, pero, ya saben, nos vamos volviendo viejos y lo olvidamos todo; pero, con la situación actual del país, amerita recordar algunas cosas.
Para los que no lo saben, la historia detrás de los cuentos infantiles es mucho más siniestra de lo que hemos visto en los últimos años. Un lobo que se come a una niña y a una abuelita, pero luego son rescatadas por un valiente leñador y, lo que es más asombroso, sin un solo rasguño luego de ser sacadas del vientre del animal. Una chica que se queda dormida después de un hechizo, unos niños perdidos en el bosque etc. Todo lo anterior, cargado de color, animación y una bonita enseñanza.
A lo anterior se suma que, estos cuentos, han encontrado en el cine su máximo esplendor y gracias al mismo, nos hemos encontrado con un universo lleno de magia. Pero, la verdad es que estas historias no fueron tan bonitas como las vemos, no; en algún tiempo se utilizaban para causar terror y, sobre todo, para controlar a las personas, hombres, mujeres y niños, que los escuchaban.
Si quieren saber más del asunto les dejo este link por aquí:
https://www.animalpolitico.com/2017/02/las-horribles-versiones-originales-cuentos-infantiles/
Pues bien, como les venía contando, una de las cosas que causa curiosidad con todo esto, es la manera cómo estos cuentos que hoy causan emoción y ternura y que son, incluso, propuestos e incluidos en la educación de nuestros niños ya que, según los expertos, ayudan a fortalecer la imaginación y son una herramienta ideal para despertar el goce por la lectura, en su momento, fueron la herramienta perfecta de manipulación de las poblaciones que los escuchaban y que de boca en boca iban replicando las historias y agregando cosas nuevas hasta convertirlas en parte de la realidad de sus vidas.
Ahora bien, uno pensaría que dichos cuentos fantásticos o historias de hadas que atrapaban y controlaban las decisiones de todos esos pueblos que no se permitían salir de su oscuridad por miedo a que se los llevara la bruja, el lobo o cualquier otro ser extraordinario, es algo absurdo del pasado, de la gente que no tenía educación, los mismos que creían en mitos y leyendas y eran controlados por la iglesia, pero, el asunto es que esa estrategia de manipulación, me refiero a estar contando historias para propagar el miedo, se quedó entre nosotros.
Sí, el miedo a través de diferentes cuentos fantasmagóricos es una de las formas más eficaces de controlar a un pueblo, aún en pleno siglo de las tecnologías y la desinformación, los pueblos y su gente siguen creyendo en cuanta tontería les quieran contar, desde pajaritos que son la reencarnación de un presidente corrupto y bufón como Chávez Hugo, hasta el fin del mundo por culpa de un murciélago.
Por supuesto, las personas ya no temen a los espíritus del bosque o al lobo, pero, si le tiene miedo a los nuevos cuentos modernos como lo son: El Castrochavismo, el Rusocastrochavismo o, el cuento más tenebroso de todos los tiempos y que habla de un monstruo más terrible que el mismo Drácula, me refiero al: El Petro. Y eso solo en el caso de Colombia, porque esa misma estrategia la utilizan en todas partes ¿O me van a decir que no recuerdan las ocurrencias del viejo Donald en la tierra del tío Samuel?
Como sea, estos cuentos sirven para que los inescrupulosos, los mismos que están amañados en el poder y que hacen de todo para que sus crímenes queden impunes, son más letales que cualquier otra herramienta que puedan utilizar y si le sumamos que los medios de desinformación les ayudan a promoverlos, el panorama no es nada alentador.
Por eso no es raro escuchar el cuento de que a Colombia se la va a tomar la guerrilla, cuando hay un grupo más peligroso como lo es el uribismo en cabeza de su líder, el innombrable Álvaro Uribe Vélez. Que Colombia se va a volver como Venezuela cuando Colombia atraviesa uno de los peores momentos de su historia con el actual gobierno, el mismo, que de manera descarada intentan perpetrar por más tiempo. Y así con estos cuentos se van robando al país, van masacrando, violando, destruyendo y vendiendo todo lo que se les antoja.
Entre tanto, el pueblo sigue atemorizado, domado, encerrado en su ignorancia, repitiendo una y otra vez las mismas historias chocarreras y dándolas por ciertas. Adoptando toda esa desfachatez como parte importante de sus vidas. Tragando entero.
Por todo esto mis queridos amigo, lo más probable es que dentro de algunos años alguien llevará todos estos cuentos a la literatura o al cine y los padres y las madres contarán a sus hijos estas historias antes de dormir y los colegios adoptarán a las mismas como parte de su pensum y los expertos y especialistas recomendaran que a las nuevas generaciones se les lea sobre el gran Alvarito que salvó al mundo del Castroestupidizmo o del cerdito valiente que divertía con sus gracias o cualquier otro invento de esos que utilizan para cubrir, distraer y hacer mal.
Sí, no hay duda, los cuentos modernos de estos criminales con corbata causan miedo, mucho miedo, porque no son cuentos fantásticos, son pura y física realidad y sobrepasan cualquier ficción.