EE. UU. llama a Colombia a traducir en resultados concretos su Política Nacional de Drogas

El Gobierno de Estados Unidos lanzó un llamado urgente a Colombia para que traduzca en resultados concretos su Política Nacional de Drogas, particularmente en lo que respecta a la erradicación de cultivos ilícitos. A través de un mensaje publicado en sus redes sociales, la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL) del Departamento de Estado subrayó que, si bien los objetivos del plan colombiano son «admirables», la situación actual exige avances inmediatos y tangibles.

“El Gobierno necesita lograr avances inmediatos y tangibles en erradicación, para el beneficio y la seguridad de nuestras naciones”, señaló el mensaje, dirigido tanto a la Presidencia como a la Cancillería de Colombia. Esta declaración se produce en un contexto de preocupación creciente debido al récord histórico de cultivos de coca en el país, un factor que ha alarmado a Estados Unidos y a la comunidad internacional.

Le puede interesar: Consejo de Estado ratificó a Johana Aranda como alcaldesa de Ibagué

En los últimos años, la administración del presidente Gustavo Petro ha implementado un enfoque alternativo en la lucha contra las drogas, centrado en la transformación territorial y la reducción de daño. Esta estrategia busca alejarse de las políticas tradicionales de erradicación forzada, priorizando el desarrollo social y económico de las regiones afectadas por el narcotráfico.

No obstante, los datos recientes sobre el crecimiento de la producción de cocaína y la expansión de los cultivos de coca han puesto en duda la efectividad de este enfoque. Según fuentes oficiales, la producción de cocaína sigue en niveles alarmantes, lo que ha generado inquietud tanto en Colombia como en otros países, especialmente Estados Unidos, que sigue siendo uno de los principales destinos de la droga.

A pesar de este llamado, hasta el momento, el gobierno colombiano no ha emitido una respuesta oficial. Sin embargo, el tema sigue siendo un punto clave en la relación bilateral, dado el impacto global del narcotráfico y la importancia de la cooperación entre ambos países para abordar este complejo desafío.