Todo por la plata
En una columna anterior manifesté que la Dimayor es un vergüenza en relación con los hechos acaecidos con respecto al partido entre Jaguares de Montería y el Deportivo Independiente Medellín, pues bien, ahora el comité disciplinario del ente rector del fútbol profesional colombiano ha decidido “suspender” la sanción de tres fechas a puerta cerrada que recaía sobre el Junior de Barranquilla para que pudiera tener público en los cuadrangulares semifinales, es decir el muerto en el estadio Sierra Nevada de Santa Marta vale menos que nada.
No es admisible bajo ningún punto de vista que con los compromisos de realizar campañas educativas en redes sociales, portar pancartas en la salida al terreno de juego, entre otros que se esbozaron por la dirigencia de los tiburones en una comunicación dirigida a la Dimayor, sean una razón de peso para permitir que ingresaran los aficionados al estadio en Barranquilla, ¿Acaso la decisión se tomó porque van a ir Nacional, Millonarios y Bucaramanga? o ¿Será porque alguien se quiere congraciar con la familia Char (propietarios del Junior)?
Lo peor de todo es que mientras tanto al América lo sancionan 2 fechas porque sus hinchas quemaron pólvora en el partido frente al Deportivo Pasto, y a los del sur los sancionaron 1 fecha por riñas entre hinchas. Mientras Fernando Jaramillo presidente de la Dimayor y Jorge Armando Otálora, Jorge Iván Palacio, Daniel Perea y Luis Alejandro Atara miembros del comité disciplinario de la entidad sigan pensando que un muerto vale una miserable taquilla estaremos condenados a una canallada más fecha tras fecha.
¿Qué pensaran los familiares de Brandon Gustavo Somosa Gutíerrez?