Hasta que la dignidad se haga costumbre
Los colombianos nos hemos acostumbrado a tantas cosas negativas que, a lo mejor, esa sea la razón por la cual cientos de compatriotas están convencidos que no puede existir la paz en la sociedad colombiana; como para no olvidar aquí les dejo esto: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-37537187
No obstante, lo anterior no es nada comparado con las innumerables situaciones del país, tanto las que salen en televisión como las que no salen y que tienen que ver con todo tipo de actos destructivos que lo único que han logrado es trastornar la mente de más de uno y por eso pensar en un cambio se les hace irrisorio y algo tan fundamental como: -No matarnos entre nosotros mismos-, es una vaina ahí que está relacionada con un meme, un chiste mal contado, una serie de televisión y hasta en un afán irremediable de echar plomo, porque, para toda esa gente que actúa cual si hubiesen sido adiestrados por el más tirano de los tiranos ¡PLOMO ES LO QUE HAY!
Pues bien, en la posesión presidencial que, sin lugar a dudas pasará a la historia como algo nunca antes visto en un país que durante décadas ha estado sumergido en la miseria de la ignorancia por culpa de los corruptos de siempre, la nueva vicepresidenta de la República colombiana Francia Elena Márquez Mina y, una vez el presidente Gustavo Petro ordenó de forma apoteósica traer la espada del libertador, dijo algo que, al igual que todo lo que tiene que ver con este proceso electoral en donde ganó definitivamente Colombia, quedará consignado en la memoria histórica del país: -“Juro a Dios y al pueblo cumplir fielmente la constitución y las leyes de Colombia. También juro ante mis ancestros y ancentras hasta que la dignidad se haga costumbre”-
https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-37537187
Sí, hasta que la dignidad para todos y cada uno de los colombianos que parecen haberla perdido se haga costumbre. Triste reconocerlo, pero es verdad. La dignidad colombiana se ha perdido en medio del manoseo, el abuso y las violaciones en todos los sentidos por parte de los mismos de siempre.
La dignidad ha estado corrompida por los Uribes, Duques, Cabales, Valencias, Sampers, Gavirias, Dávilas y toda esa parranda de gente que actúa como bestias insensibles, que han llegado a todos los límites, desde desinformar a la gente, hasta desaparecer a miles con tal de alimentar sus voraz e insaciable hambre de poder.
Por esta razón, tener a una mujer como Francia y a un hombre como Petro en la Presidencia de la República, dan unas ganas enormes de luchar por nuestra tierra amada hasta que, como lo dijo esta gran mujer, la dignidad se vuelve costumbre.
Luchar hasta que todos en el país y fuera del mismo entiendan que Colombia no es la caja menor de nadie, no es el paraíso de la prostitución o las drogas, no es, simplemente no es, un país de muerte y para la muerte.
La tarea, lo sigo diciendo, no será fácil; los verdaderos enemigos de la patria todavía están en el poder y tienen de aliados a varios medios de comunicación, si así se les puede llamar a esas casas corruptas, y harán lo que esté a su alcance por sabotear el cambio que tanto necesita el país y su gente.
