En Ibagué 88 mil personas padecen de hambre
Más allá de los discursos cargados de optimismo que caracterizan al alcalde de Ibagué, la situación social de la capital musical de Colombia no es la mejor. Lo anterior se deduce de los más recientes resultados en materia de desigualdad, que se traducen en un drama humano insoportable: el hambre crece en la ciudad de Ibagué.
En efecto, el DANE ha publicado hace poco los resultados de la medición del coeficiente de GINI, que refleja qué tan desigual es la distribución del ingreso en el país y en las principales ciudades. Este coeficiente es un valor entre cero y uno, en el que los valores cercanos a uno representan un mayor nivel de desigualdad, mientras que los valores cercanos a cero significan que la desigualdad es menor.
Para el caso que nos ocupa, resulta preocupante que, en materia de desigualdad, mientras que a nivel nacional el coeficiente de GINI pasó de 0.563 a 0.556, es decir, aunque en Colombia la desigualdad sigue siendo muy elevada si la comparamos con otros países de la región y del mundo, al menos esta desigualdad presentó una disminución, en el caso de Ibagué, la desigualdad aumentó, pasando de 0.539 a 0.542; además de ello, esta tendencia es preocupante porque Ibagué fue una de las cuatro ciudades en las que la desigualdad se incrementó entre 2021 y 2022, lo cual muestra que mas allá de las condiciones económicas y sociales generales del país, la política social de las autoridades locales ha fracasado.
Lo anterior se evidencia también en el hecho de que la pobreza monetaria extrema en Ibagué, que mide la capacidad que tiene una persona o un hogar para adquirir una canasta básica de alimentos, es de 17.6%, mientras que en el promedio nacional la pobreza monetaria extrema es de 13.8%; lo anterior muestra que Ibagué es la cuarta ciudad con la tasa de pobreza extrema más alta del país, con niveles superiores al promedio nacional en 4 puntos porcentuales. En suma, estos fríos indicadores tienen detrás una dramática situación: en Ibagué 88 mil personas padecen de hambre.
Esta situación también es consistente con los resultados de la Encuesta Pulso Social, también desarrollada por el DANE, y que fue publicada la semana anterior. En esta encuesta, se muestra que entre junio de 2022 y junio de 2023 el porcentaje de hogares que consumen tres comidas al día en Ibagué pasó de 69% a 67.1%. sobre estos resultados quiero llamar la atención en dos sentidos: primero, es claro que el número de hogares que padecen hambre aumentó en Ibagué y, en segundo lugar, el porcentaje de hogares que en la ciudad musical logran consumir tres comidas al día es menor al promedio nacional, pues en el conjunto de las 23 ciudades principales el 70% de los hogares logran acceder a sus tres comidas diarias.
Como se desprende de estos resultados en materia social y económica, a pesar de que entre 2021 y 2022 se mantuvo una dinámica importante de crecimiento económico y a pesar de los programas sociales del orden nacional, en Ibagué fueron pocos los esfuerzos de las autoridades locales para combatir la pobreza extrema, la desigualdad y el hambre. La deuda social de la actual administración local es muy grande; los nuevos gobernantes tendrán un enorme reto para revertir esta situación.
